Y harto de buscarte siempre a oscuras y de volverme en puro hielo tiré toda mi vida a la basura, y ni las ratas se la comieron. Nadie me persigue pero yo acelero. Llaman a mi puerta y yo ya a nadie espero. Pero ¿dónde están los besos que te debo? En una cajita; que nunca llevo el corazón encima por si me lo quitan. Pero ¿dónde están los besos que me debes? En cualquier esquina, cansados de vivir en tu boquita siempre a la deriva. Y llega en tu braguita el amor de visita y en mis pantalones entre los cojones. Voy a tatuarme ,azul, una casita para que allí vivan nuestros corazones. Y a deshora sale un sol alumbrando una esquina y alegrándome el día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario